miércoles, 22 de octubre de 2008

Crucifixiones en Jujuy


(De la agencia DyN)

Un sacerdote y un grupo de mujeres desempleadas de la Puna jujeña realizaron el reclamo frente a la puerta de ingreso a la Casa de Gobierno provincial.
El cura Jesús Olmedo se reunió junto a las mujeres para reclamar trabajo y más ayuda social. "Decidimos hacer crucifixiones para demostrarle al Gobierno que esto es algo serio y que no nos vamos a ir sin respuestas positivas", dijo.
El sacerdote claretiano encabezó una manifestación de desocupados e integrantes de las asambleas multisectoriales de la Puna, La Quiaca y Abra Pampa, que llegó ayer a esta capital en el marco de la llamada "Marcha del grito de los excluidos".
Unos 300 manifestantes se instalaron en la plaza central de esta ciudad para reclamar trabajo, ayuda social y otras reivindicaciones, como obras públicas y la implementación de proyectos productivos para el norte de la provincia, uno de los más afectados por la pobreza. Los manifestantes dijeron que ante la falta de respuestas del gobierno del kirchnerista Walter Barrionuevo se ataron a cruces de madera en las puertas de hierro de acceso a la sede gubernamental.
Además de Olmedo, se ataron a las cruces las dirigentes puneñas Ana María Figueroa, de 53 años, Ana Chamba, Roxana Llave y Nora Cari, de 33, Miriam Lamas, de 26, Paola Martínez, de 27 y Zulma Barrionuevo, de 40. Las mujeres dijeron que pese a las diferencias de edad entre ellas ninguna tiene empleo fijo y no pueden hacer frente a los gastos de alimentación y mantenimiento de las viviendas para ellas y sus familias.
En ese marco, Olmedo sostuvo que "no existe voluntad en los poderes del estado y sus representantes para declarar una emergencia en la Puna a pesar de lo que se pide, esencialmente trabajo genuino, proyectos productivos, obras públicas, que cumplan lo que la presidenta (Cristina Fernández) dijo", respecto a políticas de desarrollo. Olmedo y referentes de la multisectorial se reunieron ayer con el secretario general de la Gobernación, Eduardo Alderete, y funcionarios de Desarrollo Social e Infraestructura.
En el encuentro, los funcionarios recordaron los beneficios que les otorgaron en los últimos meses, como proyectos productivos y asistencia social. El secretario de Gobierno, Raúl Orellena, dijo que el Ejecutivo tiene "voluntad de diálogo y voluntad" para resolver los problemas.

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